miércoles, 30 de mayo de 2012

Aeropuertos (II)

Melilla, still. El avión no sale. "Retrasado" "delayed", pone alternativamente en la pantalla del aeropuerto. no es mucho más grande la terminal que la de la estación de autobuses de Cáceres. Sale un vuelo cada hora más o menos, algunos a Madrid y la mayoría a Málaga. El nuestro es allí. El último viaje del Cáceres 2011-12.

Los jugadores están cada uno por su lado, la mayoría con sus Ipad, Iphones, smartphones... Mi portátil, algo aparatoso, parece una reliquia. Aunque la verdad es que me estoy haciendo el interesante tecleando aquí, entre ellos. No es exactamente como hacerlo en el café Gijón con una estilográfica Montblanc, pero debe ser su versión moderna.

A mi izquierda, Olmos está solo, supongo que navegando en su pantalla con temas de economía. "Peli, vente arriba", le grita Cherry. Le llaman Pelícano, uno de los jugadores más peculiares que me he encontrado por su formación académica. Como sabréis es licenciado en Matemáticas por la universidad de Temple.

A mi izquierda también, y también solo, Justin Sedlak. A este no le habla absolutamente nadie. Se ha pasado buena parte de la temporada aislado, me da la impresión de que sin comprender mucho lo que pasaba en toda la temporada. No creo que pueda culpar a la barrera del idioma. Habla un inglés muy bueno. Pero Cáceres quizás no se la mejor opción intermedia entre una universidad de Florida y su Eslovaquia natal.

Juan Sanguino escucha música con los auriculares y Leon Williams también. Hay un núcleo central más animado con Carlos Cherry, Xavi Forcada y Pedro Robles. Al fondo, en las mesas de la cafetería, Antelo y Francis Sánchez, esa pareja inseparable. En otra mesa, el cuerpo técnico.

Vaya. Llaman por megafonía. Embarcamos. Luego sigo!!!

Final de un viaje infinito

Jugadores de los dos equipos se saludan al final. No está mal la foto para ser de Javier Ortiz.
3:59 y yo con un ordenador portátil, tumbado en un hotel de Melilla, con un ordenador portátil Acer encima de las pantorrillas.

Ha sido un día largo. Uno de los más largos de mi vida. Levantarme a las 7.00, ir en coche hasta Málaga, coger allí un vuelo hasta Melilla, tener un pequeño paréntesis hasta el partido de las 21.00, tuitearlo salvajemante, hacer fotos de la desolación final, escribir un par de páginas así como tocado anímicamente, comerse una doble whopper mientras cierran el Burguer King local, marcharse a la habitación pensando que el día acabado y, cuando crees que te vas a dormir tras fichar telefónicamente con la parienta, recibir una oferta para tomarte unas copas en el vecino puerto comercial, una especie de Maremágnum pero en cutre, por cierto.

Al final han sido tres, pero podían haber sido más. No está mal. La compañía era buena: otro periodista enviado aquí por su medio (no le nombro aquí para no hacerle más publicidad, jaja), el jefe de prensa del Cáceres y dos miembros del cuerpo técnico del club, el delegado Dani y... Gustavo Aranzana. Allí hemos estado: al calor de unos ligeros alpistes, haciendo balance un poco de la temporada  y del propio día.

Entre lo que se puede contar de lo que hemos hablado, destacaría dos ideas: 1. El equipo ha llegado fundido a este momento y estaba claro que, cuando la situación se torciese como a ocurrido en el tercer cuarto, el hundimiento iba a ser importante y 2. El club debe clarificar cuanto antes si va a tener proyecto para la próxima temporada y con qué va a contar para poder elaborarlo. Las victorias o derrotas de noviembre o diciembre se pueden decidir en las próximas semanas. Por cierto que Gustavo no se descarta para la próxima campaña. Le he notado jodido, pero también algo feliz por el indiscutible éxito que ha resultado una temporada que pintaba muy fea, pero que al final ha resuelto bastante bien. Ser quintos y protagonizar un par de series épicas en los playoffs es para estar contentos. Supongo que habrá alguien que disienta, pero en general hemos disfrutado todos de lo que ha ocurrido.

Luego vendrán los matices, claro: un 75% de la liga regular última bastante por debajo de las expectativas, los problemas estructurales y económicos del club que no parecen tener muy buena perspectiva, el análisis de los rendimientos individuales de los jugadores, la concepción de lo que se quiere y no se quiere en esta ciudad (me refiero a Cáceres, no a Melilla) para su equipo de baloncesto...

Esta noche estamos todos con la estocada de la derrota, pero dentro de poco lo veremos de otra manera, espero. A mí los párpados se me caen ya.

Un abrazo desde Melilla y gracias por el seguimiento de todos estos días. Me habéis hecho sentir muy periodista. Yo seguiré por aquí.

martes, 29 de mayo de 2012

Aeropuerto hacia la gran noche


Me fascinan los aeropuertos. O al menos antes me fascinaban. Ahora no tanto. Pero recuerdo que cuando era niño (o más niño, como me diría mi mujer), con 7-8 años, me llevaron a Barajas estando en Madrid únicamente “a ver los aviones”. Pasaron al menos 5-6 más hasta que me montase en uno. La memoria de aquella tarde viéndolos despegar y aterrizar tras un inmenso ventanal no se me va.
            No se me va sobre todo cuando vuelvo a un aeropuerto. 30 años después, el de Málaga, en el que estoy ahora mismo, debe ser el número 30 que conozco, desde Talavera a Nueva Orleans, desde el Prat a Praga. Sigue habiendo una extraña fascinación en montarte en un bicho de estos y volar, literalmente. No tengo miedo. O eso creo. Pero sí que lo continúo viendo como un pequeño acontecimiento, y hasta el coñazo de los controles de seguridad son para mí algo festivo.
            Este es un viaje especialmente especial. Dentro de unas horas el Cáceres se jugará en Melilla el pase a la final por el ascenso y yo estaré allí gracias a ese avioncito que asoma detrás de la puerta D61. No sé si será la última escena de este mes loco de ‘playoffs’ en los que he viajado más con el equipo que en los cinco años anteriores. Sin embargo, la sensación es de satisfacción porque todos estamos disfrutando: vosotros animando al equipo de vuestra ciudad/autonomía, yo trabajando y los jugadores defendiendo la camiseta. Esto es lo fundamental para hoy: continuar siendo el mismo equipo desenfadado, con mucha ‘jeta’, que se plantó en Burgos y ganó en idénticas (y diría que peores) circunstancias. Y que hace nada, diez días, le dio un repaso en la misma cancha al mismo rival que tendrá esta noche.
            Creo que llaman para mi embarque. ¿Ventanilla o pasillo? Creo que ya dije la otra vez que estos vuelos se hacen especialmente amenos por el hecho de que el avión no se eleva demasiado (debido a sus dimensiones) y puede verse lo que hay abajo. Pero esta vez, desde aquí, apenas si veré otra cosa que no sea el Mediterráneo.
            Corto. No puedo ni cargar la foto. Lo pierdo y sería la primera vez. Y mi director (ni vosotros) me lo perdonaría.

lunes, 28 de mayo de 2012

No fue falta, pero...

Un tema que detecto que se está hablando mucho hoy es el del arbitraje del domingo. De Lucas y el otro amigo son ampliamente criticados por la hinchada local, que reprocha sobre todo la jugada en la que, faltando 4 segundos, se pita falta en defensa de Cherry y Arco transforma los dos tiros libres decisivos. Lo que se reclama es que, en realidad, es en ataque. Vamos a echarles un ojo. Aquí primero pongo el vídeo de un aficionado que lo ha colgado gentilmente en Youtube.


¿Dudas? Podéis acudir a otra toma, más profesional, del canal local K30. Es un reportaje bastante curioso sobre el partido. Si la queréis ver directamente, la jugada de marras está en el segundo 50.
No sé por qué, pero no me deja ponerlo dentro del blog, como el vídeo anterior, y tenéis que picar AQUÍ para que se os abra la ventana directamente en Youtube.

¿Qué os parece? Mi opinión, y es solamente mi opinión, es que no fue falta. Cherry, listo (o pretendidamente listo) llega antes y se planta para provocar la falta en ataque. Pero logra totalmente lo contrario. Un momento nefasto y del que espero que no tengamos que acordarnos durante mucho tiempo.

Pero...

No creo que haya echarle la culpa de la derrota al arbitraje. Gustavo, que, como es habitual, dijo que no quería hablar del arbitraje pero habló, también se queja de una decisión anterior de darle tres tiros a Arco en una falta también muy rigurosa. En realidad, en un deporte tan subjetivo en el arbitraje como el baloncesto, cualquier decisión puede cambiar un partido tan igualado.

No soy de los que cargan contra los arbitrajes en mis crónicas. Me parece lamentable cuando se habla de "robo", villaratos y demás. Prefiero pensar que los árbitros son humanos y que se equivocan, sobre todo cuando son jugadas tan rápidas y discutibles. Y en concreto, prefiero pensar que no hay ninguna consigna "de arriba" para provocar tal o cual ganador o perdedor. Sería terrible. Se te quitarían todas las ganas de seguir cualquier deporte profesional.

De hecho, Cáceres tiene poco motivo para quejarse de los colegiados en estos 'playoffs'. Exceptuando el primer partido, en el que dejaron a Burgos pegar mucho y bien, le han sido bastante magnánimos. Recuerdo especialmente el quinto en El Plantío, en el que hubo decisiones muy valientes (recuerdo unos tres segundos en la zona a falta de muy poco de esos que dices "¿cómo es posible?").

Y, en concreto ayer, tampoco debe verse nada extraño. Más bien echaron una buena mano en el primer cuarto, cuando cargaron con dos faltas a dos jugadores tan fundamentales entre los visitantes como Riera y el propio Arco, que, tras cinco minutos en pista, no pudieron volver a salir hasta el segundo tiempo.

Haría mal el Cáceres si se obsesionase con los árbitros por el aparente error de la jugada Cherry-Arco. Lo que hay que hacer es salir ahí fuera y jugar.

Venga, voy a cerrar el recital de vídeos con otro, pero esta vez para animarnos. Son los últimos segundos del tercer partido.


Uñas y esperanza

"La ciudad se despertó con la moral en las uñas...". Recuerdo vivamente el inicio que David Vigario, ahora controvertido corresponsal de El Mundo en Extremadura, escribió en una información en mi periódico el día siguiente de que el Mérida bajase por primera vez a Segunda División. La moral en las uñas, la moral en las uñas... Me encantó la imagen, poderosa al máximo, y durante estos 16 años lo hemos recordado mucho. Expresa vivamente la identificación y la pena que siente un lugar cuando su equipo sufre un revés tremendo.
¿Rufino (el fotógrafo del periódico) estuvo inspirado el otro día, no?

Cáceres se ha despertado hoy con la moral en las uñas, sí. La desazón por la derrota del domingo es comprensible: estaba tan cerca asegurar el puesto en la final por el ascenso... Y no estábamos allí cuatro gatos, no. Se superó la barrera de los 4.000 claramente. Y no solo eso: el ambiente fue espectacular. Ahora hay que viajar otra vez a Melilla e intentar repetir una hazaña muy complicada: ganar el quinto partido de la eliminatoria en un ambiente hostil.

Pero se puede, que nadie se equivoque ni se haga cruces. Soy yo el primero que se está equivocando. Estos dos primeros párrafos expresan exactamente lo que no debe ocurrir: parece que estoy o estamos dando por hecho que el tren ya ha partido de la estación. Pero no es así, desde luego. Se hizo hace bien poco en Burgos, ante un equipo mejor y un público más enfervorizado, y se puede hacer mañana. De todos es sabido que este Cáceres se crece ante las dificultades, que cuando peor ha funcionado ha sido con la autocomplaciencia. Para Francis, Cherry, Antelo y compañía, cuanto peor, mejor. Y en concreto estos tres, que son el termómetro de la plantilla, tienen una cuenta pendiente con Melilla que se van a querer cobrar.

Limpiar la cabeza, olvidar el cansancio, salir del vestuario del Javier Imbroda a comerse a los de azul. Pensar que nada puede terminarse allí y así. Recordar que, globalmente, el Cáceres está siendo mejor en los 160 minutos que se han disputado en el 'playoff'. Pero claro, la lotería de los finales de partido es así. Al equipo le falta un algo de claridad en esos momentos y, si bien salvó los muebles con el palmeo de Antelo/Odiakosa el viernes, ayer se pegó un esplendoroso tiro en el pie cuando debía haber entrado en la recta final con la situación mucho más bajo control. Pero no fue así y de nada sirve ya lamentarse.

Esperanza. Una de las palabras más preciosas de nuestro idioma. Esperanza. Suena adictivo, irresistible. Lo escuchas varias veces seguidas y ves las cosas de otra manera.

Mañana, vía Málaga, vuelo a Melilla por segunda vez en diez días (antes no había estado nunca) e intentaré contaros cómo va todo. El espíritu de 'El Plantío' vivirá una tremenda prueba.

Manteneos atentos a la pantalla. Tengo una idea para otra entrada hoy mismo. Sigo hiperactivo. Buena señal de que mis uñas siguen ahí.

domingo, 27 de mayo de 2012

Una comparación imposible (pero divertida)

Día 0 del equipo del ascenso: empiezan los entrenamientos. Jiri no había llegado aún.
Plantilla definitiva del Cáceres 2011-12 tras las llegadas de Sergio y Francis y la marcha de Zengo.
¿Qué equipo era mejor? ¿El del ascenso de hace 20 años o el de ahora, que hoy puede plantarse en la final para conseguirlo? La pregunta, como todas las de este tipo, tiene un algo de absurdo y un algo de divertido. Como siempre es preferible echarse unas risas al tiempo que reflexionar, vamos a ello. Una conclusión saco de antemano: para mí, la batalla del encanto siempre la va a ganar la plantilla del 92. Los de ahora están haciendo un gran trabajo en los últimos dos meses, pero hay cosas que tan inamovibles como el Everest. Eso sí, ¡lo que ha evolucionado el baloncesto en estos 20 años! Ahora la mayor parte de los jugadores son grandes atletas y tienen que soportar mucho mayor contacto.

Bases: Dos parejas muy compensadas
Hay algo en común en los dúos Toni Romero-Ángel de Pablos / Dani Rodríguez-Carlos Cherry: eran parejas muy compensadas, en las que la titularidad se reparte mucho. En el caso del equipo del ascenso, De Pablos solía salir de inicio por su particular juego cerebral y Romero terminar los partidos, quizás por su mayor amenaza ofensiva. En el actual Cáceres la cosa ha sido más o menos así durante gran parte de la temporada: el base que empezaba no tenía por qué ser el que jugaba los minutos importantes. La cuestión es que hay mucha fortaleza en el puesto, imprescindible para que cualquier equipo funcione bien, además de mucha capacidad anotadora.
Veredicto: Muy ajustado, pero la pareja del equipo actual es más fuerte físicamente y tiene un poco más de calidad.

Aleros: Se impone la rotación de cuatro
En 1992, una clave que no se ha comentado mucho para el éxito era el hecho de lo sólida que era la rotación de los cuatro aleros. Cualquiera podía estar en la pista con cualquiera y no se notaba la diferencia. Había muchísimas opciones: los triples de Roberto Gómez y Gabi Abrines se entremezclaban con la veteranía de Juan Méndez y Jordi Freixanet, que a su vez podía jugar como '4' abierto (de hecho la canasta del ascenso la consigue así). Era un cuarteto potentísimo para la Primera División. Méndez y Abrines eran siempre los titulares, pero a menudo, dependiendo de las circunstancias del partido, los otros dos adquirían mucho protagonismo.
En el presente, el Cáceres hace equilibrismos, ya que se ha quedado con únicamente dos aleros: un Francis Sánchez súper decidido cuando mira a canasta (y en general, acertado) y un Xavi Forcada que poco a poco se ha convertido en el alma del equipo con su generosidad y entrega. No se sabe cuándo Pedro Robles (de cierto parecido, salvando las lógicas distancias, a Roberto Gómez) podrá regresar.
Veredicto: Claro. Cuatro aleros que se sentían importantes contra dos que se tienen que multiplicar y que se ven obligados a jugar muchos minutos. Además, el equipo del 92 tenía a Sant Jordi, carajo, y contra un santo no se puede luchar.

Pívots: Más paralelismos, más
Quizás la gran similitud entre el equipo del ascenso y el de ahora está en la presencia de un '5' larguísimo que condiciona mucho al rival. Es evidente que Sergio Olmos interviene mucho menos en ataque que Jiri Okac, pero tanto uno como otro hacen valer muy a menudo sus centímetros (el checo es ligeramente más alto que el alicantino). Esa gran presencia la aprovecha el que está al lado. "Jiri nos hizo buenos a todos", me decía hace una semana Felipe García. Cierto: muchas veces, los dobles marcajes sobre el checo facilitaban que el otro poste estuviese solo, incluso debajo de la canasta. Si era lo suficientemente listo en el pase, era canasta segura. Antelo es más de trabajarse sus puntos desde el exterior o en el rebote ofensivo, pero también se ha visto muy ayudado por Olmos a nivel defensivo, como el resto.
El lujo de la plantilla actual es la presencia de Leon Williams saliendo del banquillo. Obviamente, ni Benedé ni Santi García tenían esa importancia en el equipo y sus roles se acercaban más al que tiene ahora Justin Sedlak. Por último, Juan Sanguino apenas ha disputado minutos con el marcador igualado en los últimos meses.
Veredicto: Igualado. Okac era muy determinante, pero Antelo y Williams ofrecen mucha producción.


sábado, 26 de mayo de 2012

Pope

Foto: Luis Cid
Hablamos mucho de los triples de Francis, el heterodoxo tiro de Antelo, los largos brazos de Sergio Olmos, la onmipresencia de Forcada, la cautivadora seriedad de Leon Williams... Pero en este Cáceres que esta noche se ha puesto con 2-1 en la eliminatoria a favor frente al Melilla hay una estrella a la que no se está valorando en su justa medida. O al menos es alguien que está pasando más inadvertido de lo que su peso en el enorme equipo supone ahora mismo: Daniel Rodríguez García.

Hasta hace poco no me he enterado de que muchos en el mundillo le llaman 'Pope'. Curioso que coincida en este mote con un histórico del deporte cacereño, recientemente fallecido. Ignacio Soler, que también fue concejal y dirigente vecinal, era un loco de las bicicletas. Ahora, el nuevo 'Pope' de Cáceres es un base que si bien ya ha estado rindiendo a un nivel notable esta temporada, ahora en los 'playoffs' se está saliendo literalmente.

El debate sobre si él o Cherry debían ser el titular murió hace relativamente poco. Es claro que Dani Rodríguez es hora el base principal de este equipo, aunque la escasez de efectivos exteriores permite que Cherry, siempre necesitado de sentirse importante en el equipo, no haya visto muy resentidos sus minutos sobre la pista. Pero es Dani quien manda con la bola y el que, muy por encima de la mayor parte de sus compañeros, está exhibiendo un momento físico envidiable.

Hoy, sin ir más lejos, se ha clavado más de 38 minutos sobre la pista, un poco al viejo estilo de los 80. Al final se le veía un poco quemado, sin muchas ideas, pero es que anteriormente había dado un curso de dirección y de decisión. Quizás abusa del bote a veces, pero por lo demás está siendo fundamental para que el equipo llegue tan lejos. Supo levantarse inmediatamente del fallo en el último segundo del tercer partido ante el Burgos.

El suyo es un caso curioso. Se ha convertido en uno de los bases punteros de la LEB ya con 28 años. Este verano el Cáceres está ágil en la gestión de ficharle por un precio asequible, quizás no muy 'despiertos' sus rivales al detectar que ya en Tarragona y La Palma lo había hecho razonablemente bien en la segunda categoría. Pero muchos en el mercado no parecían fiarse del chico, formado en la cantera del Joventut y que ha dado unos cuantos tumbos desde entonces en EBA, LEB Plata y hasta la ACB (Jugó dos partidos en la 2003-04 con el Lleida). Esta es su ficha en acb.com y esta la de la Federación Española. Como curiosidad, a la derecha rescato su foto siendo un crío. Durante un momento dudé si era él realmente.

Hay jugadores que tienen un despertar tardío, que tienen su propia maduración interna al margen de lo común. Este parece ser su caso. De él hablan maravillas todos los que le rodean, excepto los que le 'acusan' de ser muy del Barça. Él y Xavi Forcada forman el 'lobby catalán' del vestuario, un dúo que está otorgando una enorme energía a la línea exterior.

viernes, 25 de mayo de 2012

El día del 2-1, o del 1-2

Jugadores de ambos equipos, al final del segundo partido. La película continúa hoy (Guerrero / Melilla Hoy)
Suele decirse que el tercer partido es el clave de las series de 'playoff'. Como tantos estereotipos al respecto, mucha razón tiene y no tiene al mismo tiempo. Sin ir más lejos, en la eliminatoria pasada frente al Ford Burgos fue el rival del Cáceres el que ganó el tercer partido, pero no la serie. Lo importante es ganar el último. Así lo suelto, rompiéndome la cabeza.

Llega el día del 2-1, o del 1-2. Habla el Multiusos, me he atrevido a titular mi previa en el periódico. Sí, eso es lo que va a pasar. Va a hablar para bien o para mal, en el sentido de que la oportunidad para plantarse en la final se va a explorar al calor del hogar. Tengo mucha curiosidad por ver la respuesta del público. ¿4.000, dice algún optimista?

Tras una semana en la que los precios de las entradas y las declaraciones de Toni Pedrera han marcado el ritmo informativo, llega la hora del baloncesto. Con la duda de Antelo hasta el último momento (hay un momento que no sé si realmente es duda o es una estrategia, aunque a Gonzalo García me parece que no se la dan...), el Cáceres llega bien posicionado para hacerse con el control del pulso. En los 80 minutos jugados hasta ahora ha sido globalmente mejor, pese a la ausencia de su máximo anotador y reboteador, pero eso no garantiza serlo en los 80 que vienen. Hay que seguir como hasta ahora. Ya habrá tiempo de pensar en el descansadito Menorca, que volvió a vencer ayer al Navarra con holgura.

El Melilla sí ha hecho muy bien una cosa: sacudirse cualquier tipo de presión. Me pareció un tanto exagerado por parte del Cáceres intentar mantener que ellos seguían siendo los favoritos, pese a haber perdido el factor campo en el primer partido. Pero no tenía otro remedio: el equipo de Gustavo Aranzana se ha hecho acreedor al favoritismo por lo que pasó en la ciudad autónoma. De hecho, hay un mensaje curioso en el hecho de que el Melilla no llegase hasta pasadas las doce de la noche a Cáceres: aunque obviamente nos tomemos en serio, no nos importa asomar el morro por el Hotel Barceló V Centenario a la hora que sea si es lo que creemos que nos conviene.

Ese clima de euforia mal entendida puede ser el enemigo de los cacereños que, aunque no lo puedan reconocer públicamente, saben que hasta ahora han sido mejores y que las ausencias de Robles y Antelo quedan casi equilibradas por las de DeVries y McKeither en el rival. Esto reduce los partidos al pulso desesperado de dos equipos de rotaciones muy cortas, muy dependientes de sus jugadores 'on fire', como Salva Arco y Francis Sánchez. El Cáceres parece tener un poco más de pólvora, sobre todo por dentro, y más todavía si Antelo puede aportar algo hoy y/o el domingo.

Bueno, dejémoslo un poco por ahora. Total, darle tantas vueltas a todo cuando, al final, decidirá el Fary.

PD: Aranzana se reivindica. Se le ve muy a gusto en territorio 'playoff', como si este fuese el tipo de reto por el que se hizo entrenador. No digo que haya estado desmotivado o perdido durante la liga regular, pero ahora está especialmente metido, sabiendo que está recuperando imagen con cada decisión acertada en estas semanas, que están siendo muchas. Fenomenal por él. A nivel personal es un buen tipo, os lo aseguro. Pero un matiz que ya hemos apuntado aquí en alguna ocasión: cuanto mejor está jugando el equipo ahora, más cantoso es lo que ha pasado anteriormente.

jueves, 24 de mayo de 2012

Polémica#2, Pedrera

Otros tiempos, ¿no, Toni?
Pues nada, primero fue lo de las entradas y ayer lo de Toni Pedrera hablando sobre que no hay pasta en la Junta para impulsar o soportar un equipo ACB, así, en plan advertencia. La hinchada, claro, se ha indignado, igual que ocurrió la semana pasada con Jesús Luis Blanco por algo muy parecido. Es la típica situación en la que estoy un poco con las dos partes. Los que piensan que me mojaré en esto tomando claramente partido, mejor que dejen de leer. Allá voy, a dejar insatisfecho a todos.

1. Pedrera dice la más asquerosa y punzante verdad. Cualquier cosa se le puede reprochar al tipo, menos que no sea sincero. Ve un micrófono y dice lo primero que se le viene a la cabeza. En ese sentido, es muy poco político. Lo normal en otro caso (al menos en el tipo de político que he conocido a esta hora) sería soltar un par de ambigüedades, jugar un poco con el lenguaje y esperar a que los resultados deportivos no le lleven a esa mortal tesitura de tener que decir "no" a sufragar buena parte de los 7-8 millones de euros que costaría arrancar en la ACB. Yo estaría por decir que va a enviar un maletín a Melilla y/o Menorca para que eliminen al Cáceres. Pero no lo digo porque la ironía y el humor grueso se captan muy mal por escrito.

Tiene toda la lógica del mundo que si esta gente del PP está recortando en educación, sanidad y otras cosas básicas, el deporte (el profesional y el de base) no se quede exactamente igual de como estaba. Es el camino que ha escogido España y también Extremadura. La mayoría les votó para que hiciesen este tipo de cosas horribles, pero parece que necesarias para que el país y la autonomía salgan de una situación complicadísima a nivel económico (he de decir que no soy un experto en temas financieros; bueno, no lo soy en casi nada). No creo que engañasen a nadie porque en campaña electoral no lo dijesen claramente. Jugaron a políticos, justo lo que ahora no ha hecho el director general de deportes.

Así es que Pedrera, que lleva unos mesecitos peleándose con todo el deporte regional (federaciones, clubs, deportistas y hasta asociaciones de personas con discapacidad) porque es el hombre de la tijera, le preguntan por esto, va y lo suelta. ¿Y?

2. Es un palo innecesario para la ilusión de mucha gente en un momento especialmente excitante. Y más viniendo de alguien que, si es algo en la vida, es gracias al baloncesto profesional.

Ahí, Toni pincha en hueso. En huesazo. Se pueden decir las cosas de un millón de maneras, y seguramente algunas de ellas más adecuadas en este momento de los 'playoffs'. Pero en el fondo él es solamente un ejecutor de una política 'superior': no me ha dado la impresión durante estos meses que sea él quien tenga la última palabra en materia deportiva en la Junta. Alguien (o "alguienes") le aconsejan, le guían, en lo que, no lo olvidemos, está siendo su primera experiencia en la política o simplemente en la gestión de un presupuesto. Pedrera es solamente una voz. A los populares les gusta colocar a exdeportistas conocidos más que a técnicos en ese puesto: Colomán Trabado, Niurka Montalvo, Antonio Peñalver... Seguro que os salen muchos más.

La paradoja es que, en su caso, está ejerciendo ese papel justo cuando, desde los 15 a los 30 años, ha sido deportista profesional, la mayoría de ese tiempo bastante bien pagado por dinero que también provenía del erario público o similar. Siete de esas temporadas las pasó en el equipo de la ciudad a la que ahora le está diciendo que no, que esta vez, a no ser que consiga una improbable financiación privada, no va a poder reeditar su sueño. 

¿Cómo debe sentirse? Pues tampoco creo que eso le mate. En los años posteriores a su retirada le vimos muy poco por el Multiusos. ¿Es el típico exdeportista que no le gusta el deporte que practicó profesionalmente? Sí ha estado muy vinculado a las artes marciales.

Una conclusión muy personal (y aquí sí me mojo): ¿Realmente no hay dinero para que el Cáceres suba a la ACB? No. Pongamos 5-6 millones de euros no son nada en un presupuesto de una comunidad autónoma. Lo que no hay (ni parece que vaya a haber) es voluntad política. No es como con el AVE, que está claro que no hay cientos de millones de euros para terminar todos los proyectos que se empezaron. "Sólo" tiene que haber el 'ok' de la Junta y Cáceres tendrá ese dinero, pero eso es muy muy difícil: sería exponerse a las críticas de muchos, de muchísimos, quizás hasta justificadas.

martes, 22 de mayo de 2012

Menorca, camino de ser el hipotético rival

Supongo que lo que esperan Taylor Coppenrath y Keith Langford es el rebote. O el fin de la humanidad. Nunca se sabe (Foto:  Roberto Estabolite)
Estamos tan centrados en la eliminatoria Melilla-Cáceres que no estamos siguiendo apenas nada la Navarra-Menorca, cuando es importante porque de ella saldrá el equipo con el que los extremeños se enfrentarían por el ascenso en el caso de, sin ir más lejos, ganar viernes y domingo en el Multiusos.

Aparentemente, hay menos matices. El Menorca va ganando 0-2, primero con un 68-75 y luego con un 81-83 en la prórroga. Puede parecer lógico porque todos sabemos que los baleares tienen mejor y más larga plantilla, pero no deja de tener su aquel el hecho de ganar dos partidos fuera de casa seguidos en un 'playoff'. Eso demuestra una fortaleza enorme. Y si nos fijamos, no son solamente dos, sino que en la anterior ronda, ante el Breogán, también venció en el tercero y el cuarto a domicilio.

La deducción es que era un privilegio exagerado que los pamplonicas tuviesen el 'factor campo' a favor. Es el suyo un proyecto muy digno de admiración: escaso de dinero, pero con mucho ojo para los fichajes. Esto conlleva tener un equipo corto en el que, como le está ocurriendo al Cáceres ahora, todos se sienten importantes. Starosta vuelve a estar a un muy buen nivel y Jorge García conoce perfectamente esta liga, pero además jugadores que parecía que no funcionarían en Oro, como los Iñakis, Sanz y Narros, están haciéndolo fenomenal. De Mikel Uriz no vamos a hablar porque a alguno le vendrían pesadillas.

Pero nada que ver con el portaaviones que es el Menorca, un conglomerado de estrellas nacionales de la liga que lo raro es que haya terminado cuarto en la liga regular, empatado a victorias con el tercero, el propio Navarra. A lo largo de la temporada, sus principales jugadores se han ido traspasando el protagonismo. Ahora parecen estar muy bien Marc Blanch y Oliver Arteaga. Y eso que siguen arrastrando que su único americano, Taylor Coppenrath (ya con dos ascensos en su manga), no está bien a nivel físico. En todo caso, su gran poder es una rotación larguísima de 10-11 jugadores.

Muy raro será que el conjunto de José María Berrocal no venza en alguno de los dos partidos que llegan ahora en la isla y que se plante tranquilamente en la final, en la que en cualquier caso tendría el 'factor campo' a favor.

Tormenta bien resuelta

El Cáceres Patrimonio de la Humanidad ha resuelto bien una 'mini crisis' que él mismo había provocado. Los precios para los partidos del fin de semana habían soliviantado a la afición, que esgrimía numerosos argumentos para considerarlos exagerados: venir de una eliminatoria previa, estar a final de mes, la coincidencia el viernes con la final de Copa y, como estrella, la oportunidad tremenda que supone para el baloncesto de la ciudad y la necesidad que tiene el equipo de poder contar con un gran ambiente en las gradas.

Me resulta precioso que los abonados, los habituales, se enfadasen mucho más por los precios puestos los no socios. "No queremos estar los de siempre" era más o menos el argumento. El aficionado de toda la vida está dispuesto a pagar lo que sea (bueno, sin pasarse; 18 euros por los dos partidos no está mal, pero tampoco es baratucho para alguien que en su momento compró un abono), pero lo que quiere es 'reenganchar' al que en su momento desertó del pabellón y ahora duda si, al calor de lo bien que se plantea la situación deportiva, volver a subirse al barco.

Mientras yo confieso que me rascaba ahí mismo durante todo el día, Internet tronaba por una solución que llegó a última hora de la tarde. La estupenda idea que había sido en la ronda contra Burgos los packs abonado+no abonado se retomaban. Inexplicablemente se habían suprimido. Creo que van a funcionar muy bien. Al final no puedo meter a nadie en un posible pack de mi padre y un amigo (son abonados reducidos, mayores de 65 años), y eso que enseguida me había comprometido con 6 personas y camino de otras 2. Pero a mí también me podían las ganas de ver un pabellón si no lleno, sí con un entradón.

Veremos qué tal trascurre la semana. Yo creo que puede haber 4.000 personas. Ese es el reto realista.

Luego os cuento más cosas. Estoy todavía un poco con el 'jet lag' de Melilla, jaja.

lunes, 21 de mayo de 2012

Últimas horas en Melilla



"Como si fuera un error
siempre encuentro a mi alrededor
cosas que amenazan al final del día
con volver,
volver como el viento.
Como el viento..."

Suena Nacho Vegas en mis oídos. "Sólo viento", se llama la canción. Si no tuviese los auriculares puestos, lo que escucharía bien fuerte es lo que hay fuera: solo viento. Espero que la situación mejore de cara al vuelo que tenemos mañana a las 8.30 hasta Madrid. A la hora de comer espero estar en Cáceres. Y no es que me vuelva loco por salir de aquí. Me ha gustado Melilla. No había estado nunca y realmente me cuesta imaginarme vivir aquí (sólo cambiaría Cáceres por un ático en Manhattan, jaja), pero ver sitios nuevos y definitivamente diferentes es un placer inenarrable.

Ah, baloncesto.

El Cáceres se pira de aquí con 1-1. El jueves por la mañana, cuando un somnoliento grupo de jugadores y técnicos cogía un bus hasta Málaga apenas 24 horas después de haber llegado de Burgos, si se hubiera hecho una encuesta (privada, claro, porque en público siempre se marcarían el moco de decir que no), la mayoría hubiese firmado volver así. Aranzana se sobra un poco cuando dice en la rueda de prensa que sigue considerando al Melilla favorito. Es evidente que a su equipo le ha ido bien cuando ha sido el 'outsider' de las eliminatorias, primero en Burgos y luego aquí. Y no quiere cambiar ese rol. Pero a Gonzalo García se le ha escapado, sonrisa en ristre, una explicación bien clara. "Gustavo tiene muchos tiros pegaos y nos quiere meter la presión a nosotros, pero sabe que el favorito son ellos", respondió.

El Multiusos debe decidir. Jugar dos partidos en casa es una oportunidad inmejorable para pasar a a la siguiente ronda. Sí, me diréis que pasaba lo mismo contra Burgos y se necesitó la hazaña del 15-M para poder eliminarles. Pero estaremos todos de acuerdo en que Burgos no es Melilla. El primer día nos pareció casi una bobada, pero no hay que olvidar que Cáceres ha jugado estos dos partidos sin su referente anotador en el juego interior, José Ángel Antelo, al que se espera recuperar para el viernes. Leon estuvo arrebatador el viernes, Sedlak también hoy de cara al aro, Olmos quizás no ha lucido tanto como ante Burgos, Sanguino ha salido un ratito y no ha desentonado... Pero Antelo es Antelo. Me sitúo mentalmente en que hubiese habido un 2-0 en contra y su nombre no se nos iría de la boca, o de los dedos, en mi caso.

Es ahora o nunca, por encima de cuestiones económicas --el club debe atinar con los precios de las entradas, lo que no quiere decir que tenga que regalarlas; eso sería un error--; Va a ser un espectáculo enorme jugarse estar en la eliminatoria decisiva delante de nuestra propia gente. Estaremos allí para contarlo (y durmiendo en casa después, jaja). No hace falta decir que para mí está siendo muy especial la experiencia. Creo que se me nota.


"Lo haga bien o lo haga mal,

hasta apagarme,
prometo hacerlo de verdad.
Hoy me encendí al anochecer,
tendré que limitarme a arder
y después dolerá pensarme así
y no habrá ni un alma aquí".





Sí, el disco de Nacho Vegas ha ido avanzando. Buenas noches desde Melilla.

domingo, 20 de mayo de 2012

¿Domingo de 0-2?


Empieza el día con alegría, Leticia Sabater dixit. La cosa sigue ventosa en Melilla, aunque hace sol. De momento, ligera sesión de estiramientos en el pabellón (la verdad es que yo me he quedado en la habitación, ejem, reflexionando) y casi a las dos la comida para echar luego la siesta y marcharse al partido, que será a las 19.00. La verdad es que no entiendo muy bien por qué el Melilla no ha accedido a la petición del Cáceres de jugarlo por la mañana. A cambio, se ofrecía jugar el hipotético cuarto también por la mañana del domingo. Cada equipo se hubiese ahorrado una noche de hotel. Pero el Melilla decía que las 12.00 era una mala hora para el público. En fin. Eso, en todo caso, no afecta el estupendo trato que nos están dando por aquí en todos los sentidos.

Sólo queda esperar a que pase el tiempo y nos plantemos en un partido sobre el que llevamos casi dos días hablando. Os dejo unos links de lo que he publicado en el periódico: dAquí tenéis mi previa, aquí tenéis lo que dicen Forcada y Williams y aquí mi reportajillo con Felipe García, del que os hablé ayer. Me llama mucha gente desde Cáceres preguntándome por mis sensaciones previas. A casi todo el mundo le digo que positivas, que la exhibición del tercer cuarto del viernes un buen aval, pero que no creo que vaya a ser tan fácil. Fueron los clásicos minutos en los que a un equipo le sale todo y al otro nada (incluyendo bandejas y tiros en buena posición). Ahí es cuando se notó que, cuando físicamente hay un alto nivel de cansancio, el primero recibe un golpe fuerte le cuesta levantarse. El Cáceres demostró una buena fortaleza al inicio del segundo cuarto, cuando se puso nueve abajo y enseguida arregló la situación.

Pase lo que pase, el equipo regresará con una sonrisa. Un 1-1 lo hubieran firmado todos antes de venir hacia aquí, por lo que esta tarde se acude a jugar sin la presión de tener que ganar, como prácticamente ocurrió en el segundo de Burgos. Ya veremos qué entrada de público hay, pero no creo que mucha más que la del viernes. Lo importante es seguir la misma línea y, si es posible, darle una estocada casi definitiva a la eliminatoria, porque con un 0-2 se me hace muy difícil no aprovechar ninguna de las dos oportunidades en el Multiusos.

Posdata fotográfica: Arriba os dejo una foto (cedida por el Melilla Hoy) del palco del pabellón el viernes. Entre las autoridades puede verse a Juan José Imbroda, el político del PP que es presidente de la ciudad autónoma desde el 2001. Así, sin mucha mala baba, se me ocurre una preguntilla, o dos: ¿veremos al fin a José Antonio Monago en algún partido de los 'playoffs' en Cáceres? ¿O a su hombre en el deporte, Antonio Pedrera Leo?

Explorando Melilla (día y noche)


Melilla desde la zona del puerto.
Ha sido un día bonito para mí aquí en Melilla. Lo he dicho ya: no he estado aquí nunca y no estaba muy seguro de que pudiese gustarme, con tanto prejuicio y tanto tópico previo. Es cierto que no es un lugar al que 'se venga' expresamente de turismo, sino que vienes a algo, como es nuestro caso con el baloncesto. Pero tampoco es tan inhabitable o kafkiano como algunas veces el boca a boca intenta expresar. A mí por lo menos no me lo ha parecido.

La verdad es que soy bueno para los sitios nuevos. Todo me interesa cuando se trata de abrir los ojos y tomar nota, sobre todo las ciudades. El turismo rural no tanto, lo reconozco. Pero lo urbano me fascina, con todos sus matices. Y más las ciudades heterogéneas como esta, con distintos ambientes, configuraciones, niveles, historias y, por supuesto, culturas.

Melilla es uno de los sitios más peculiares de España. Quizás el que más por encontrarse enclavado en otro país, con una mezcla cultural importantísima entre lo cristiano y lo musulmán. Eso se respira en las calles de un modo fascinante, al menos ante la mirada del neófito. Está claro que también hay problemas (seguramente más graves que en el resto del país) económicos y laborales, pero eso no le quita encanto.
Felipe García, el '14' del ascenso.

Hoy he tenido una gran ración, y además en dos tiempos. Por la tarde quedé con el personaje que os dejé en el aire en la entrada anterior. Juan Luis (Morán, está claro) acertó en un comentario posterior. Es Felipe García, el '4' titular del equipo que logró el ascenso en mayo del 92. Mañana podréis leer la entrevista en el periódico (no olvida aquello, no), pero el tipo ha estado simpatiquísimo conmigo, muy nostálgico de lo que ocurrió aquel año. Me ha parecido que era feliz en su ciudad, que conoce bien y que defiende a capa y espada. Nos hemos montado en su coche y la hemos recorrido, desde la zona histórica fortificada hasta el famoso y (al parecer complicado) barrio de La Cañada. Me ha contado muchas cosas de cómo es Melilla y cómo es el melillense, y había un brillo de orgullo en él. "Esto ha progresado mucho en los últimos 15 años". No debe ser fácil crecer y vivir aquí con las limitaciones simplemente geográficas que hay, pero él ya era un jugador corajudo que se sobreponía a las dificultades. No me canso de darle las gracias. Por cierto que se ha confesado lector de Bujacocesto.
La valla (una parte de ella, más bien).

Después de escribirme mis dos paginitas para el periódico de mañana, he quedado con Bárbara, la amiga de mi mujer (bueno, mía también) de la que os hablé que curra aquí como trabajadora social en un centro de drogodependientes. También hemos dado una vuelta larga en su coche, y he descubierto algunos sitios nuevos. Melilla tiene doce kilómetros cuadrados únicamente, pero hay un poco de todo: un aeropuerto chiquitito, un campo de golf, un trocito de playa, un millón de cuarteles (varios de ellos reconvirtiéndose a otros usos), una zona pija y otra, digamos, trabajadora. He visto muchas equipaciones deportivas, varios centros sociales, se está construyendo un nuevo hospital... Se ve una fuerte inversión estatal aquí, como de todos modos no puede ser de otra manera. Es una plaza importante, tan española como otra cualquiera. También, claro, está la omnipresente valla que separa a la ciudad de Marruecos, adonde los melillenses suelen ir a pasearse también, a sus estupendas playas, a comprar buena fruta y verdura...
'La Compañía', se llama esto. Ejem...

He pedido a Bárbara que me lleve a un sitio de comida local y hemos ido al Suly's Bar, donde hemos dado buena cuenta de un cuscus, una corvina en adobo y una carne de cordero. Todo bastante bien, y muy barato (menos mal, esta factura tampoco la puedo pasar al periódico, vengo a pensión completa). La atención, estupenda. Después, hasta hemos tomado una copita en la zona del puerto al lado del hotel, en un sitio llamado 'La Compañía', pero no había demasiada gente. Me dice que eso no se pone bien hasta las 2 o las 3.

En fin, me voy a ir acostando, mañana va a ser un día durillo. Partido a las siete de la tarde, ahora que recuerdo.

sábado, 19 de mayo de 2012

Tranquilidad, pasta, pollo y una entrevista sorpresa

Olmos, el traductor de Leon Williams.
Siesta time en el Tryp Puerto, dicen que el mejor hotel de Melilla en competición con el Parador Nacional. A los jugadores, técnicos y a mí nos han puesto pasta y pollo, el tópico de toda comida de deportista. No ha estado mal.

La mañana ha transcurrido con normalidad. Hemos ido al entrenamiento en el escenario del encuentro. Por cierto que el Melilla no podrá ejercitarse en él esta tarde porque hay un campeonato local de gimnasia. ¿Os suena? En fin, que en el entrenamiento, poca cosa más allá de lo previsible. Antelo no ha hecho nada y, salvo sorpresa monumental, está descartado para mañana, por mucho que Aranzana, cuando le hemos preguntado, se ha salido por la tangente. Como imaginaréis, su discurso ha estado más bien centrado en la prudencia, la cautela, la calma, la tranquilidad y esas cosas. No puede ser de otra manera. Esto va solo 0-1 y quedan dos victorias más para plantarse en la final.

Por cierto que el entrenador es el otro 'lesionado' del equipo. Está bastante ronco, supongo que por el desgaste de estos playoffs. Haciendo la cuenta, el de mañana será el séptimo partido en 16 días. Hace unos años tuvo unos nódulos en la zona de la garganta y a veces le cuesta recuperarse cuando fuerza la voz.

El entrenamiento no ha durado ni 45 minutos, incluyendo un trabajo de pista muy escaso de menos de media hora. Desde luego a estas alturas las fuerzas están demasiado escasas como para desperdiciarlas. Sí se han trabajado algunas situaciones en las que Melilla intentó (no consiguió) hacer daño en el primer partido. Como Antelo no estaba, el 'cinco contra cinco' lo ha tenido que completar Mario Hellín, el preparador físico y, por cierto, exjugador de cantera del BBC. No les he visto, pero Antelo y Hellín han estado luego en la playa ejercitando la pierna. El gallego ha estado a punto de ser enviado a Cáceres antes de tiempo para que continuase allí su rehabilitación con mejores medios.

Por supuesto, muy buen rollo. Hay que ver lo que cambia todo cuando empiezas una serie ganando y no perdiendo. Protagonista de alguna coña ha sido al final Sergio Olmos, que ha ejercido de traductor con Leon Williams, que ha dicho para la prensa de Cáceres que cree que ante Burgos no estuvo lo suficientemente agresivo y que por eso salió así de duro ayer.

El pabellón está aquí al lado del hotel. Fijaos que los jugadores van y vienen andando y creo que ayer, tras el partido, se ducharon en sus habitaciones y no en el pabellón. Son 5 minutos y además la gente es muy tranquila. No hay mucho que ver con el ambiente de Burgos, aunque esta mañana había cierta risa entre el equipo porque uno de los empleados del pabellón llevaba una camiseta del Autocid, supongo que regalada u olvidada por algún jugador.

Antes de comer he intervenido en Minuto 30, el programa de Canal Extremadura Radio que hoy dirigía Iván Herrero. Se ve que esto está levantando expectación. Me voy a poner con las páginas de mañana, en principio dos. Os prometo una espectacular entrevista con un personaje sorpresa con el que he quedado dentro de un rato. Pero no voy a dar más pistas. Me gusta teneros ahí, comiéndoos la cabeza.

Ante todo, mucha calma

Foto: Guerrero / Melilla Hoy
Belén Esteban en la tele hablando de su divorcio (parece que esta vez va en serio, pero no hay que bajar la guardia), el aire acondicionado de un buen hotel a tope, una cena bastante decente al lado de los nuevos dueños de Cáceres (vaya coña que se traían, incluso con los periodistas), la satisfacción del trabajo bien hecho (o al menos entregado a tiempo para que la rotativa de Córdoba empiece funcionar), la seguridad de que cuando apague la luz me dormiré enseguida, el ego bien engordado por las 'interacciones' del Twitter, las promesas de un futuro cercano incluso más estupendo... Me siento bien esta noche, la primera noche de mi vida en Melilla (y probablemente, la antepenúltima)... La fascinante sensación de que las cosas funcionan perfectamente dentro de nuestro microcosmos puede ser peligrosa.

Es el momento de estar tranquilos. Siempre lo es, pero esta vez más. Está muy bien la alegría, disfrutar de los buenos días como el de hoy, pero sin perder la referencia a la realidad. Faltan dos victorias para llegar a la final por el ascenso y se tienen que trabajar con el mismo tono de firmeza que hasta ahora. La tentación está ahí: el Cáceres ha sido esta noche muy superior al Melilla, pero nada más. El domingo es otro partido que empieza 0-0, como decíamos después del duro estreno de eliminatoria ante el Ford Burgos.

Creo que la victoria de hoy se le tiene que agradecer precisamente a los chicos de Andreu Casadevall. Los burgaleses pusieron el listón tan alto, fue tan duro aquello, tan exigente, que el enfrentamiento ante el Melilla se ha convertido en 'casi fácil'. Tanto es así que se ha soportado con bastante comodidad la ausencia de un hombre clave como Antelo, al que, sinceramente, no veo jugando el domingo e incluso, en caso de volver a Cáceres con 0-2, ni siquiera el viernes siguiente. Sería un drama que la pequeña rotura la fascia se agravase por exponerle prematuramente.

Gente.. Que mañana será otro día. A las 11.00 entrenamiento y luego la tarde libre. Ya os voy contando cosas.

Buenas noches

viernes, 18 de mayo de 2012

En el aire

Estoy en un avión, en un Helitt. Bueno, en realidad ahora estoy en un avión, pero cuando envíe esto ya estaré en tierra, en Melilla. O al menos eso espero. Si no es así, fue un placer conoceros. Espero salir bien en las noticias.




Hemos salido con un poquitín de retraso desde Madrid. El vuelo tiene previsto aterrizar a eso de las cuatro. Allí nos recogerá Bárbara, una amiga de mi mujer que vive en Melilla (trabaja en un centro de drogodependientes). No he dado muchas señales de vida en las últimas horas. He estado, ejem, muy liado. Mi amigo Alberto, del que os hable´ayer y que me hospedó en su apartamentito de Ortega y Gasset, nos llevó a Marta Fernández Maeso –una fantástica periodista extremeña que estaba en el periódico y que ahora culmina un master en El País— y a mí a un par de sitios pijos de la zona que le gustan a él. Estuvo bien, pero la cosa se prolongó un poco. Tampoco mucho, eh. No seáis malpensados. No creo que los tickets cuelen cuando los intente pasar a administración. No, seguro que no. Directamente no los pedí. (Ahora es cuando os reís).



Como tenía tiempo por la mañana, he quedado para tomar un café con Sergio Ruiz, un periodista maño al que conocía solo de hablar por teléfono cuando él estaba en nuestro ‘hermano’ en Zaragoza, El Periódico de Aragón. Como siempre hemos tenido cierta química (un sentido del humor irreverente y una visión de la vida algo descarnada), teníamos ganas de estrecharnos la mano. Ahora vive en Madrid y por fin, tras algún intento en vano, se ha dado la oportunidad. Hemos paseado un poco por el Colegio Ramiro de Maeztu y el histórico pabellón Antonio Magariños. Algo ‘pirao’, pero muy buen tipo. Si no lo sabéis, tiene un blog sobre basket muy recomendable, con historias distintas. Se llama Puertatrás.



En Barajas me he encontrado a Claudio ‘el de Hoy’ (si le leéis lo interpretaré como una infidelidad, jaja), a Antonio Doncel el de Radio Sansueña (podréis esta noche escuchar su retransmisión en el 107.6 de FM o Radio Sansueña) y a Janice, la simpatiquísima novia de Leon Williams, que me temo que será la única persona que anime al Cáceres esta noche. La chica, una norteamericana de origen coreano, es toda una ‘fan’ del pívot, y no le importa hacerse kilómetros y kilómetros para verle en acción.



Ah, baloncesto, sí. A eso vine. Las vibraciones que llegan de Melilla son buenas, al menos por lo que he hablado con Jorge García, el ‘hombre orquesta’ del club. Os supongo al corriente del asunto de Santiago Segura y demás estrellas que andan por allí en el festival de cine. Creo que están en el mismo hotel que el equipo, el Tryp, que por cierto está muy cerca del pabellón Javier Imbroda.



Ya veremos qué pasa, qué estado físico tiene el equipo y obviamente qué tal llega Melilla. Llevo tres o cuatro días hablando de la ausencia de McKeither, de lo importante que puede ser, pero también hay que dar el dato de que consiguieron ganar cuarto y quinto ante Lleida sin él. Eso sí, su producción en sólo 15 minutos por partido es bastante alta, 7 puntos y 4 rebotes.



¿Qué será eso de ahí abajo? ¿Ciudad Real?

jueves, 17 de mayo de 2012

Cáceres-Plasencia-Madrid-Melilla


Pues ya voy hacia Melilla. He salido a las cuatro de la tarde de Cáceres y no llegaré hasta las cuatro de la tarde de mañana allí. Aunque son míticas las malas comunicaciones de nuestra tierra, y la tremenda limitación de la ciudad autónoma, que en ese sentido es poco menos que una isla, no solamente le puedo echar la culpa a eso, sino más bien a que a veces me gusta tomarme las cosas con calma.

La explicación es que he cogido un tren hacia Madrid, donde pasaré la noche en casa de mi amigo Alberto Hernández Lopo, gran amigo, gran aficionado al basket cacereño y, aunque todavía explorándose, gran articulista de EL PERIÓDICO EXTREMADURA sobre temas económico/político/sociales. Abusaré un poco de su hospitalidad y, sin apreturas, a las 2 de la tarde de mañana tomaré el vuelo de Helitt hacia Melilla desde la Terminal 2 de Barajas. En hora y media espero estar allí. No soy demasiado aprensivo con los aviones, excepto porque me destrozan un poco los oídos.

Los necesito muy abiertos (y los ojos, y el resto de sentidos) para contaros aquí, en el Twitter y desde luego en el periódico todo lo que ocurra en los dos primeros partidos de la serie. Quiero agradecer la apuesta de mi empresa y sobre todo, del director, Antonio Tinoco, al afrontar un viaje que desde luego no es económico. Pero si por algo se ha caracterizado el periódico ha sido por su 'cacereñidad' y por su cuidado del deporte extremeño. Al igual que los jugadores, yo también siento la responsabilidad de estar a la altura, por mucho que a veces la precipitación haga cometer errores y uno tenga que estar en demasiados frentes. Pero nada que ver con lo que pasaba hace años, con muchos menos medios. Mi hermano José María, al que, como sabréis los que me conocéis, admiro enormemente también como profesional, realizó una cobertura similar el año del ascenso (Andorra, Canarias, Mallorca), transmitiendo lo que pasaba con aquel 'dream-working class team'. Pero desde luego lo de internet y las cámaras digitales era una entelequia y los ordenadores portátiles eran de todo, menos portátiles. Él y Jaime Jiménez, el llamado 'cuarto Ortiz', estarán ahora en la redacción para cubrirme las espaldas. Trabajo imprescindible.

Concluidos los peloteos, y antes de que la batería del cacharro se resienta mucho, os recuerdo que los partidos serán mañana viernes (21.00) y el domingo (19.00). Esto último obligará a quedarse en Melilla hasta el lunes por la mañana. Creo que el vuelo de vuelta hasta Madrid sale a las 8.15, no estoy muy seguro. Volveré a estar en el hotel del equipo, el Tryp Melilla, y desde allí intentaré contaros, sin violentar la intimidad de nadie, lo que se respire.

Mira, ya vamos por Plasencia. Ahora es cuando el tren cambia de sentido. Como me fastidia eso.

Os dejo con unos minutos musicales de una canción estupenda que se me ha venido a la cabeza, sobre todo por el título. Permanezcan atentos la pantalla.





miércoles, 16 de mayo de 2012

Descanso... relativo

Antes de que empiecen las palabras, algunas imágenes de las que saqué en la celebración, a pie de pista (gracias a los seguratas que se fiaron de mi palabra cuando me preguntaron qué coño pintaba yo allí). Me salieron un poquito mejor que las de la otra vez, aunque tampoco sean para lanzar cohetes. Allá van.

Con los aficionados.

Antelo y Sanguino abrazándose. ¿Y la camiseta de Dani?

La footo es mala, pero había que ponerla: Núñez lo flipó. 

Desolación 'cheer-leader'

Los otros héroes.
Hoy ha tocado descanso, o algo parecido, porque la verdad es que no he dormido muy allá y me he levantado a las 10.30. He estado un rato en la redacción charlando con mis compañeros, viendo algunas cosas del día anterior, y también preparando un poco el viaje de ya mismo a Melilla. En principio saldré el propio viernes por la mañana para estar allí casi cuatro días, porque el segundo partido es el domingo a las 19.00 horas y hay que quedarse allí hasta el lunes. Será un placer contar lo que pase por allí, como en general lo está siendo esta experiencia. También he escrito un pequeño texto que saldrá mañana.

El equipo ha currado un poco más que yo, pese a la paliza del viaje (menos paliza cuando es con el sabor de la victoria). Llegaron casi a las 6 de la mañana y a las 6 y media ya estaban otra vez entrenando. Y es que en realidad no hay mucho margen para preparar el primer encuentro ante el Melilla. Mañana mismo muy temprano (creo que a las 7) tiran para Málaga, donde cogerán el vuelo.

Los 'playoffs' son así. Acabas de encajar un golpe y tienes que olvidarlo porque si no te cae el siguiente enseguida. Y al contrario: cuando te apuntas un tanto, es mejor no volverse loco celebrándolo porque la relajación la puedes pagar cara.

El Cáceres haría mal en contagiarse del cierto ambiente de euforia que se respira. Es fenomenal que haya mucha alegría y ambición, pero si algo le ha ido bien al equipo en la serie contra el Burgos ha sido el tema de ir de 'tapado', primero recordando constantemente que unos eran subcampeones de la liga regular y otros novenos, después levatándose de la paliza del primer día y por último ganando los últimos dos partidos cuando aparentemente el triple de Tillman lo había dejado contra las cuerdas.

No olvidemos que el equipo está literalmente fundido, por mucho que mantuviese la cabeza fría en los minutos finales en la remontada liderada por Antelo, Francis y ante todo un tremendo espíritu de equipo que infundió un miedo terrible a la derrota a los locales. El precio que pagaron ya lo visteis: tres minutos y medio que pasan a la historia, a la pequeña-gran historia del basket cacereño. Aquí va el resumen para quienes no lo hayan podido ver.


Decía que el Cáceres no puede ser considerado favorito, si alguno está tentado pensarlo. Al menos en mi opinión. El Melilla tiene una baja importante como Ridge McKeither, un 3-4 muy físico que hubiese generado problemas al más puro estilo Marcus Vinicius, pero posee una plantilla bastante larga y, aunque jugaron el martes también, esta semana no llevan la misma kilometrada encima que el Cáceres. Sus interiores, sobre todo Odiakosa y Wachsmann, son muy duros e intuyo que la batalla del rebote no va a estar tan decantada como en la serie de Burgos.

Además, tienen el factor campo, que aunque haya sido poco trascendente con los chicos de El Plantío, no debe ser menospreciado, digo yo. Eso sí, y ahí ya habrá más de uno 'salivando', si de Melilla se vuelve por un 1-1 o, soñando mucho, con un 0-2, la que se va a liar en el Multiusos el día 25 puede ser chica.

Cierra los ojos


4:46 de la mañana.

Venga, un último esfuerzo. Ya sé que llevas 21 horas sin dormir, que has hecho mil kilómetros (afortunadamente, no conduciendo) en este lapso, que has vivido un partido intensísimo antes, durante y después, que has actualizado el blog, el twitter, contestado a whatsapps, llamadas, escrito tres páginas de periódico y hasta has hecho fotos de la celebración final (esta vez han salido un poco mejor, pero tampoco para tirar cohetes).

Venga, un último esfuerzo. No te vayas a dormir todavía y cuéntale a la gente lo feliz que te sientes, no tanto por la victoria sino por lo bien que han representado la camiseta de tu ciudad estos jugadores, que no se han dado nunca por vencidos. Y haberlo podido contar. Lo feliz que te sientes por haber hablado con unos cuantos de los 15 'compatriotas' tuyos que han viajado hasta Burgos porque, simplemente, les apetecía explorar un sueño en vivo. Lo feliz que te sientes porque en esa ciudad te han tratado fenomenal, tanto la gente del club como la de la prensa y los hoteles y restaurantes, y porque el público, animando muchísimo a los suyos, ha estado muy correcto. Lo feliz que te sientes porque has visto disfrutar como nadie a un tipo como Pedro Núñez --el único directivo del Cáceres presente, por cierto-- del éxito de un club que lleva muy dentro y en el que tiene un empeño muy personas hasta extremos muy complicados. Lo feliz que te sientes porque has cerrado las tres paginitas en hora y te han felicitado de todos lados, en vivo y en internet, por 'simplemente' hacer tu trabajo.

Venga, un último esfuerzo. Un último esfuerzo por expresar que esta vida tiene días como el de hoy, días en los que todo sale bien y que hasta lo que sale mal tiene una extraña belleza, un sarcasmo difícil de descifrar. Días en los que llamas a casa pisando el parquet donde hasta hacía media hora diez tipos se despellejaban mutuamente y tu mujer se alegra de tus buenas noticias. Porque te imaginas a tu padre escuchando el partido por Radio Sansueña y volviéndose loco con los triples de Francis, los tapones de Olmos, el resurgir final de Antelo, el coraje de Forcada...

Venga, un último esfuerzo porque divisas las luces de Cáceres a 30 kilómetros y caes en que nunca has visto una ciudad tan hermosa en tu vida y tienes el privilegio de vivir en ella, por mucho que muchas veces nos saque de quicio por culpa de nosotros mismos. Y Las Capellanías te parece el gran parque industrial del futuro y pasas por un Cánovas lánguidamente solitario y de repente tienes un 'flashback' a la altura de la Fuente Luminosa.

Venga, un último esfuerzo. O, mejor, un penúltimo esfuerzo. Porque el penúltimo esfuerzo, en realidad, será en Melilla.

martes, 15 de mayo de 2012

Dos horas y poco



Aquí estoy, en la cafetería del Hotel Abba, tres horas y cuarto antes del partido. He estado adelantando alguna cosa para el periódico de mañana, pero poco se puede adelantar cuando todo está condicionado por la victoria o por la derrota.

De momento, solamente veo buenos síntomas. Leon Williams está aquí en la mesa de al lado, charlando animadamente con su novia (que acaba de llegar) y con el utillero del equipo, Pepe. Bueno, más con su novia que con Pepe, pero en fin. Le he pedido que me haga una pose "en positivo" para colgarla en el twitter (arriba la repito) y se ha prestado con una sonrisa aparentemente sincera. ¿Es raro que un tío tan serio en la cancha salga del papel fuera, no?

También han llegado cuatro de los chicos del San Antonio Cáceres junior que acaban de concluir su participación en el campeonato de España: Pedro Núñez hijo, Sergio Roldán, Angel Zazo y Miguel García. Desde aquí mi aplauso y supongo que el de todos por la buena imagen que han dado estos días en Zaragoza, dando la cara (y a punto de ganar) ante dos 'canteras grandes' como las de Gran Canaria y Baskonia. El futuro siempre es algo seductor, ¿no creéis?

Pero ahora solo cuenta el presente, lo que pase dentro de un par de ratos, a poco que nos descuidemos. Sé que hay mucha gente nerviosa en Cáceres, muy ansiosa de que llegue la hora del partido. Creo que, si el equipo da la cara, será suficiente para estar contentos, se gane o se pierda.

En Burgos aprecio otro tipo de nerviosismo. Casadevall apeló ayer al arbitraje, quejándose de que se estaban señalando demasiados contactos. Es una buena clave. Si a Ortega, Tillman y demás les dejan repartir sin castigo, los de casa tendrán bastante ganado. Si, por el contrario, Cáceres puede materializar de nuevo la superioridad que ha mostrado bajo los tableros en la mayor parte de la serie, me parece que esta noche habrá cláxones por Cánovas.

Veremos si puedo actualizar luego. Confío en Vodafone.

'Playoffs' históricos (o prehistóricos)

Seis victorias y cinco derrotas en once series de 'playoff' en 20 años. No son muchas para una ciudad tan baloncestística como Cáceres, ¿verdad? Bueno, esta tarde he estado mirando un poco la historia de los dos clubs --el extinto y el actual-- y me salía eso. He hecho una pequeña reseña para el periódico que saldrá mañana (uno, aunque esté de descanso, nunca descansa del todo) con la principal conclusión de que hacía 19 años que el Cáceres (este o el anterior) no jugaba un quinto partido de una serie. Voy a hacer un repaso concienzudo de las que protagonizó el Cáceres CB, que seguro que no las tenemos en la memoria tan recientes como los del Cáceres 2016 o Creativa.



--91-92. El año del ascenso, derrota y resurrección.
Andorra 3, Cáceres 2. El primer 'playoff' de la historia de Cáceres terminó del modo más amargo posible: con una derrota en el quinto partido que impedía, por el momento, el ascenso, aunque el peculiar sistema de competición de aquella temporada en Primera daba una segunda oportunidad. El equipo de Martín Fariñas 'robó' el factor campo a favor en el primer partido (84-85), pero perdió el segundo (75-69 en el Principado) y el tercero (80-82 en la Ciudad Deportiva). Todo se decidió por los pelos en un quinto, un 73-71 en el que los 22 puntos y 11 rebotes de Ray Smith y los sorprendentes 14 de Martín Farfán pudieron más que los 17 de Okac y Abrines.

Cáceres 3, Canarias 0. El perdedor de aquella 'final' tenía la posibilidad de subir si vencía en los dos 'playoffs' siguientes a equipos que habían ido jugando otra fase. En fin, un lío. El primero de ellos se resolvió con contundencia en plena Semana Santa: en Cáceres, 72-63 el primer partido (Felipe García 15 puntos, Okac 6 tapones) y 82-79 el segundo (30 puntos de Abrines), mientras que en La Laguna la sentencia llegó con paliza (73-95, tremendo trío Abrines 22, Felipe y Okac 21).

Prohaci 1, Cáceres 3. La lucha definitiva por el ascenso empezó mal, con una derrota más o menos clara en Mallorca (93-82, pese a los 21 de Okac). Sin embargo, dos días después se reaccionó bien en la misma cancha (67-73, Okac acercándose al 'triple doble', 18 puntos, 8 rebotes y 7 tapones) y todo quedaba para lo que ocurriese en la Ciudad Deportiva. No hubo perdón: 91-78 el viernes 8 (22 de Méndez) ni tampoco el mítico 10 de mayo (80-79 con 22 de Abrines; Mincy hizo 38).

92-93. La milagrosa salvación en Lliria.
Ferrys Lliria 2, Cáceres 3. Dos de los peores de la liga se jugaban la continuidad en ella y se dudaba francamente que el perdedor pudiese levantarse de la lona. Fue el Lliria, que no ha vuelto a oler la élite desde entonces ni de lejos. Fue un 'playoff' especialmente dramático, como todos, pero este mucho más, creo yo.
La eliminatoria empezó mal para Cáceres (75-66), incapaz de parar a Nenad Markovic (30 puntos), aunque el recién incorporado Kenny Walker daba buenos síntomas (15+11). De hecho, la victoria el día siguiente fue clara (71-89), en un partido monstruoso de Kenny Green (25+13+4 tapones, 46 de valoración) y Kevin Pritchard y Enrique Fernández jugando también los 40 minutos y superando los 20 puntos.
En el V Centenario el viento pareció estar de cara tras otro cómodo tercer encuentro (71-57), con 'Sky' Walker al mando de las operaciones (22+8), pero, cuando todo estaba a favor, el Lliria vencía en el cuarto (72-73). La historia ofreció uno de sus sarcasmos, porque faltando unos segundos Jordi Freixanet tuvo la posibilidad de dar la victoria y la permanencia a los suyos, pero falló un 1+1. 
Había que volver a Lliria, en las condiciones más complicadas posibles. Y el escenario se complicó del todo tras una pésima primera parte (35-26), pero ahí aparecieron los dos Kennys --Green cojísimo--, para liderar el 62-68 final. Incidentes al final con lanzamiento de objetos a la cancha y una luna del autobús de los aficionados del Cáceres rota.


93-94. Clasificación para Europa y sueño fugaz ante el Joventut.
Cáceres 2, Pamesa Valencia 1. Fue un llamado 'playoff de clasificación' a tres partidos con el Pamesa que servía para ajustar las posiciones en el cuadro de cara a las eliminatorias por el título en sí. Otro sistema de competición raro, pero para el equipo de Manolo Flores fue muy importante, ya que supuso asegurar la clasificación europea para la siguiente temporada. Tocó remontar, ya que el primer encuentro se perdió (80-82) y hubo que ganar los dos siguientes, uno en la Fonteta (77-79) y otro en el regreso al V Centenario (94-81). Quien estuvo allí no podrá recordar que el grito final de "Cáceres-Cáceres" se sustituyó por el de "Europa-Europa" ni el estado de posesión total de jugadores como Jordi Soler, Nebojsa Ilic y Raymond Brown.
Joventut 2, Cáceres 0. Después llegó la única ocasión en la que el Cáceres tuvo la oportunidad de jugar un 'playoff' por el título. Su pulso con los otros verdinegros fue en cuartos de final. El conjunto de Zeljko Obradovic acababa de proclamarse por primera (y única) vez campeón de Europa y llegó al primer partido, en Badalona, algo despistado. Las ventajas extremeñas oscilaron entre los 10 y 15 puntos, pero los locales reaccionaron de la mano de Dyron Nix (no jugaba competición continental) para vencer 68-66. El segundo choque (era otra serie a tres) fue en Cáceres y ahí ya hubo menos dudas, 75-82 y fin de la temporada.

97-98. Salvando los muebles en Ourense
Cáceres 3, Ourense 1. Aquel año tan malo se solucionó la situación con una victoria bastante sencilla ante un Ourense que estaba todavía más destrozado o que, simplemente, había acertado menos en los fichajes con la temporada ya iniciada. Porque, claro, el parecido en las plantillas respecto a las que empezaron la temporada era mera coincidencia. El 'Comas Team' se despachó con dos victorias holgadas en el inicio de la serie (75-61 y 95-69), después hizo un poco la cabra en el tercero (98-79) para sentenciar en el cuarto, con alguna que otra galleta al final en el túnel de vestuarios (77-81). 
Tim Breaux, Gaylon Nickerson, Malcom MacKey, Pablo Laso, Ramón Rivas, el indescriptible estado físico de Greg Stewart... No me gusta recordar demasiado aquello, pero fue un momento que a la larga haría mucho daño. Se gastó muchísimo más de lo deseable para reforzar el equipo, lo que impulsó que la Caja de Extremadura, que lo estaba meditando hacía tiempo, abandonase el patrocinio. ¿Realmente era necesario? No lo sé. En aquel momento lo reclamábamos todos, pero...


2004-05. Nada que hacer ante el 'Fuenla'
Fuenlabrada 2, Cáceres 0. El Cáceres se metió milagrosamente en las eliminatorias, pero poco pudo hacer ahí ante un potentísimo Fuenlabrada que terminaría subiendo a la ACB. Tuvo algo más de opción en el segundo partido en el Fernando Martín (77-68) que en el desastroso primero (91-57). Especialmente baja la aportación en ambos encuentros del hombre clave de aquel equipo dirigido por Ñete Bohigas, que era Josh Asselin. Por cierto, gracioso recordar la plantilla verdinegra entonces: Dani López, Rafa Huertas, José Ángel Antelo... En el tercero y definitivo la resistencia fue mayor (75-80), ya con Asselin a su rendimiento normal. Aquel choque en el V Centenario pasa a la historia como el último del Cáceres CB en categoría profesional. Luego, como sabréis la mayoría, vendió su plaza en LEB al Calpe y sobrevivió un año más en Primera autonómica.

Hasta aquí llego con el repaso histórico o más bien prehistórico. El resto está muy reciente. Ya con el nuevo club se han jugado 'playoffs' en la 2007-08 en LEB Plata (Caja Rioja 0, Cáceres 2) y en LEB Oro en la 2009-10 (Burgos 3, Cáceres 1) y la 2010-11 (Obradoiro 3, Cáceres 1).

NOTA: Hay quien puede considerar también 'playoff' los del antiguo Cáceres para intentar clasificarse para la fase final de la Copa del Rey en las temporadas 1993-94 (OAR Ferrol 2, Cáceres 1) y 1994-95 (CAI Zaragoza 2, Cáceres 1), pero no los he incluido al no estar relacionados con la liga en sí.