lunes, 7 de julio de 2008

O'Xeito, 12 "kilos"





Pues... aquello pasó el 16 de julio de 1991. A un lado de la mesa del restaurante O'Xeito, un garito de comida gallega en el Paseo de la Castellana en Madrid, se sentaron Carlos Sánchez Polo, José María Bermejo y Santos Chaso; al otro, José Manuel Gómez Carballo y Ángel Magdalena. De lo que se trataba era de cerrar el acuerdo telefónico al que ambas partes habían medio llegado ya: el Cáceres Club Baloncesto, representado por el alcalde de la ciudad, el presidente y el secretario del club, iba a comprar la plaza en la entonces denominada Primera División (hoy LEB Oro) al Bosco de Vigo, que envió a su presidente y a su gerente.




Ese almuerzo, en el que parece que todo transcurrió con la normalidad clásica del tira y afloja (no os sé decir lo que comieron, aunque alguna nécora caería, supongo), cambió las vidas de muchos de nosotros. Fue el inicio de algo grande grande grande como sería, apenas diez meses después, el ascenso del Cáceres CB a la ACB tras una impresionante temporada. Tras el regateo de rigor (el Cáceres ofrecía siete, el Bosco pedía quince) hubo un acuerdo, según se publicó entonces, por doce millones de pesetas, una cifra que, sarcasmos de la historia, es inferior a la que el Cáceres 2016 ha pagado por la plaza del Palma Aqua Mágica. Y eso que desde entonces los precios del pan, la leche y los cubatas han subido una barbaridad, ¿no? La leyenda cuenta que principalmente el que puso aquella pasta (más o menos gansa) fue Manuel Ollero, el de Tambo, al que hay que agradecérselo, claro.




El acuerdo llegaba después de un surrealista episodio con el Hospitalet, que, seamos francos, engañó impunemente a Bermejo y compañía. Con los catalanes se había llegado e incluso firmado un acuerdo, pero sólo querían ganar tiempo para solucionar los problemas del equipo y llegaron a dar un talón sin fondos al Cáceres para formalizar su inscripción, algo que era necesario para la posterior venta de la plaza.




Lo curioso es que, revisando lo publicado aquellos días, nada hacía presagiar lo enorme que sería para Cáceres sólo unas semanas después tener un equipo en Primera División. Sí, era algo largamente esperado, el Caja Badajoz estaba solo mucho tiempo en esa categoría, pero... No hubo declaraciones grandilocuentes (sí insultos contra los directivos del Hospitalet, a los que se llegó a calificar de gentuza, mangantes...). El club sobrevivía en un pequeñísimo local de la calle Arturo Aranguren (no creo que tuviese más de 15 metros cuadrados) desde el que Martín Fariñas y Jesús Luis Blanco hacían los fichajes.




Luego aquella operación fue arranque de hacer las cosas bien durante mucho tiempo y nadie deslegitimó el posterior ascenso a ACB porque el inicio del asunto fuese así, a la vista de que con el CABA nunca ibas a poder, al fin y al cabo.




Curiosamente, los caminos del baloncesto de Cáceres y el de Vigo nunca han vuelto a cruzarse. Parecía que lo harían la próxima temporada en la LEB Plata, pero...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo que ha cambiado la vida en 17 años y lo que hemos vivido "en esta ciudad feliz" gracias a aquella negociación y acuerdo de compra con los vigueses.

Cuantos aficionados fuimos a Andorra, Leon, Valencia, Malaga, Madrid y demás ciudades españolas con la excusa del baloncesto? Gracias a eso hemos reido y celebrado muchos momentos bonitos el ascenso, la permanencia, clasificación a Europa y tantas victorias en partidos importantes.

Muchos hemos derramado lagrimas en León, Valladolid y tantas cosas que hemos vivido gracias a Baloncesto.

Preguntaros y pensad que hubiera hecho sin tener baloncesto?????

Algunos critican y maldicen a Bermejos (desconocia lo del dueño de Tambo) que si se gastaba a troche y moche el dinero de la Caja Extremadura etc... Pero sin él y sin el Alcalde Sanchez Polo nunca hubieramos tenido BA LON CES TO en Cáceres.

Anónimo dijo...

Creo recordar que hay alguna foto por ahí del famoso talón sin fondos. Lo de la estafa del Hospitalet es digno de película de Ozores, con J.L. Morán haciendo de puente telefónico (en una cafetería de Madrid, no se habían inventado los móviles aun) entre la sede de la federación y el club en Cáceres. Suerte que descubrieron el engaño a tiempo.


Poco después de esto surgió la posibilidad del Bosco de Vigo y esta vez sí salió todo bien y tuvo un desenlace feliz, pero el caso del Hospitalet es digno de investigación.

Anónimo dijo...

Pues agradecidos a Manuel Ollero, muchas gracias caballero, qué duda cabe que puede que todo lo que se ha vivido por aquí desde entonces en cuanto a baloncesto de élite se refiere se debe a aquella gestión y a que este hombre puso la pasta.

No sé a cuánto estarían las plazas en la mítica Primera División pero 12 kilos de la época me parece una cantidad bastante respetable. Los 30.000 euros de ahora se debe a que como hay más equipos y ligas que longanizas pues la cotización de la plaza baja; entre eso y la crisis, para muchos salir es un marrón y optan por retirarse y vender para recuperar algo de pasta si pueden.

P.D. Sí, los cubatas han subido...y ya no hay botellón, quién lo iba a decir hace 17 años. ¿Qué será del basket en Cáceres dentro de 17 años?, puede que se hable de esta compra, ya se verá, bueno, mejor...que lo veamos todos.

Un saludo.