domingo, 5 de septiembre de 2010

¿Un mes todavía? (o la conexión entre Pedrera y Sidao)

La verdad es que los partidos amistosos de pretemporada son algo así como metadona para los yonkis. Quitan un poco la ansiedad, son un cierto sustitutivo, pero no dan el placer que da lo auténtico, la competición. Hoy el Cáceres 2016 ha jugado el primero de los ocho que tiene previsto en este mes que falta para que empiece la liga en Lleida. No voy a decir esa estupidez de que el resultado (101-68 "en Cajasol") es lo de menos (¿lo sería si hubiese ganado?), pero vamos, que tampoco hay que darle importancia a casi nada de lo que suceda en las próximas semanas en la cancha, creo yo.

Lo digo porque si bien una pretemporada puede ser orientativa de lo que puede pasar luego, cuando arranque lo serio, no hay que fiarse demasiado. Los partidos suelen ser malos, con muchos errores, con muchas rotaciones porque los chicos no tienen oxígeno y porque es el momento en el que todos jueguen. Más que nada es un momento para evaluar sensaciones, ir ensayando algunos conceptos, ver de qué pie cojea cada uno y todos en general. Ni volverse loco con las derrotas ni eufórico con las victorias. Eso sí, estaría bien que el Plasencia este año no te diese pal pelo en la Copa de Extremadura.

Particularmente frío me dejan los partidos a puerta cerrada como el de hoy. Es mejor que un entrenamiento, pero peor que un amistoso "normal". El movimiento parece inteligente, porque cuando se juega contra un ACB hay unos gastos mínimos de 4.000-5.000 euros (y eso no es fácil de sacar, ahora que estás pidiéndole a la gente el dinero del abono). Pero luego no lo es tanto, o sobre todo no lo es en el mismo sentido que si se juega con público y una mayor seriedad teórica.

En mi calidad de informador (ejem...) he estado en varios partidos de este tipo y casi todos han sido bastante desagradables y no sé exactamente cuál es el grado de fiabilidad de las conclusiones que se pueden sacar. Desconozco si ha ocurrido en Sevilla hoy (no creo), pero hay un denominador común en casi todos ellos: la violencia. Una desconcertante violencia.

En 1995, el Salamanca vino una buena tarde al V Centenario a echar unas canastas. Era aquel equipo vestido de naranja que se autodenominaba los Toros y que tan malos ratos nos hizo pasar en su efímera etapa ACB (dos años, cuatro partidos, tres derrotas). Resultó que en una jugada fortuita, alguien soltó un codo y Claude Riley y Toni Pedrera acabaron intercambiando unos upper-cuts ante el barullo general. El partido siguió a duras penas, pero creo que ya nada importó mucho después de algo tan desagradable. Lo cierto es que Pedrera, del que algún día glosaremos su imponente y controvertida figura, era un experto en aplicarle digamos "intensidad" a los entrenamientos y también fue muy comentada una bronca suya con Rod Sellers.

Me vino a la cabeza el asunto hace un par de años, en la temporada en LEB Plata. El Cáceres 2016 organizó un partidillo entre semana con el Habitacle Badajoz y tras otro "lance del juego", Sidao le lanzó un impresionante puñetazo a Mazur, al que afortunadamente le dio tiempo a agacharse. También hubo otros momentos de un "mal rollo" increíble. Aquí tenéis una pequeña crónica al respecto.


Conclusión a vuela pluma: parece que los jugadores, o algunos jugadores, cuando no hay un arbitraje "serio" ni posibles sanciones de por medio, se lo toman de otra manera (quizás ocurrió lo mismo en el famoso Grecia-Serbia de antes del Mundial), lo cual relativiza enormemente el valor de este tipo de partidos. Faltan 26 días para que empiece el basket de verdad. De momento, nos iremos conformando con los sucedáneos y con especular sobre lo que nos gusta o no nos gusta del equipo, pero lo único que valdrá en realidad es lo que pase en el Barris Nord el 1 de octubre.

PD: Vale, sí, está el Mundial de basket, pero esta selección nuestra resulta tan desconcertante... cuanto menos puedes confiar en ella, mejor juega. Y al revés. De todos modos, en general el nivel baloncestístico no está siendo muy allá, creo yo. Demasiadas ausencias, demasiado miedo a perder, demasiadas zonitas para esperar el fallo del rival...

2 comentarios:

Macario dijo...

Vaya... agradable sorpresa encontarme con tu entrada tras haber repasado lo que dicen las webs de la victoria ante los helenos.

Bueno tampoco hay que darle mucha importancia, aunque palmar de 30 escuece... vivas en Cáceres o en La Mancha... Al parecer alguno ha estado muy bien ... "compitiendo" vamos... con gente de superior nivel.

En cualquier caso, estamos a principios de temporada y tal, y no tiene mayor importancia... por supuesto si hubiésemos ganado sí la tendría...porque la gente diría que el Murcia no es rival, así que mejor si me apuras...

Tiendo a ver el vaso medio lleno, y creo que el haber encajado un resultado abultado servirá de estímulo a los jugadores.

No entiendo muy bien lo de jugar a puerta cerrada, pero doctores tiene la Iglesia...

Aprovechando que mi mujer anda liada con exámenes de un máster de esos a distancia, me he metido una sesión completa de básket esta tarde, y te diré que a difererencia de lo visto hasta ahora, he disfrutado como un enano. Me han gustado mucho ambos partidos, y veré lo que pueda del resto... Sobre todo es bueno para el baloncesto que se hable de él... y al menos tenemos garantizado 4 días más con los medios enchufados... Lo cierto es que de los nuestros conviene no desconfiar, porque corres el riesgo de que te dejen con el culo al aire. Si la cosa se da bien, espero ver las semifinales el próximo sábado con el mítico Lyman en tierras manchegas.

Un abrazo y enhorabuena a Jordi por cierto. Me gustó mucho el post que le dedicaste. Me pareció acertado y muy humano.

lyman dijo...

Bueno, pues he terminado de ver el Serbia-España ahora en "riguroso" diferido y la verdad es que permanece una sensación extraña...no ha sido un buen Mundial en el que defendíamos título (3 derrotas)...no ha estado bien la gestión desde el banquillo...algunos jugadores quizás no debieran estar ya ahí (Raúl -pero es cierto que fue recambio de última hora- o Mumbrú) y otros tiene que dar el paso adelante (claro, Ricky o Fran -si le dejan)...pero vamos que estoy muy lejos -y además empieza a cansarme- del tono ultracrítico y lastimero que noto en parte de la prensa y de la afición. Teníamos ausencias notables, los rivales no son precisamente fáciles, y a este equipo no se le ha acabado la cuerda (en deporte, no se puede ganar siempre¡¡). Para nada hay que ponerse apolípticos y sí que analizar los fallos y trabajar en corregirlos...madre mía, si hace 10-15 años caer en cuartos hasta era un logro...en fin, perdón por el off topic, que al menos iba de baloncesto.

Cuando te vas haciendo mayor, aparte de un montón de desventajas, también vas cogiendo experiencia (en ocasiones); y la experiencia me dice que esto de la pretemporada tiene un valor muy pero que muy relativo. Es "metadona" (que bueno) para el aficionado y afine para los profesionales, así que no puedo sacar ninguna conclusión del abultado resultado en Sevilla y menos siendo el primer partido. Como dices, ya para la Copa estará más perfilado el equipo y a ver si de una vez conseguimos que no se vaya (casi) siempre al Norte (sobre la última Copa de Extremadura tengo un dato curioso que ya comentaré...).

Y lo de la puerta cerrada, que no me gusta, supongo que tiene sentido económico tal como lo cuentas...lo que me parece curioso es eso efecto endurecedor que has encotrado en los antecedentes cacereños.

Abzs

PD Como Mac, me sumo a la felicitación para a Jordi, del que haces una magnífica descripción en tu post anterior- y del que sólo oigo hablar buenas cosas de su labor -múltiple- en el club...nada, repito mi enhorabuena y que le sigan marchando muy bien las cosas en lo personal y profesional¡