martes, 15 de febrero de 2011

30 horas de basket (y algo más)

Sí, estuve en la Copa del Rey. Fugazmente, pero estuve. 30 horas en Madrid dan para bastante. Me lo pasé fenomenal, aunque eso no es ninguna sorpresa. Paso a relataros el asunto por numeritos, que no os perdáis.




Noche de basket. Llegué el jueves sin tiempo a asistir a los primeros partidos de cuartos de final, así es que me los contaron más o menos la gente con la que salí por esos antros de Dios (a 11 euros la copa, creo recordar, joder con el tal Velázquez). Un grupo de extremeños bastante curioso formado por los hermanos Lopo, Roberto Blanco (ex segundo de Plasencia y ahora de nuevo en las categorías inferiores del Cáceres 2016) y otro entrenador de cantera que no conocía, Isaac.



Por supuesto, se habló de mucho más que de lo que estaba sucediendo en el Palacio. Más bien fue un repaso al momento baloncestístico cacereño, a cómo sus protagonistas van asimilando (o no) sus roles. Pero no solo hubo canastas verbales. También muchas risas, confidencias... Cuando sales una vez al año en Madrid, todo te parece nuevo, deslumbrante. Excepto el único garito más o menos conocido en el que estuve, La Posada de las Ánimas, una auténtica mierda. Los demás (Green, Eccola, Boggo), muy agradables.



Mañana de basket. Bueno, quizás no. Tras regresar vía taxi (¿me estafaron?) al piso en el que me hospedé por Argüelles, dormí un ratito, pero había que aprovechar la mañana. Así es que realicé las clásicas visitas a La Casa del Libro y FNAC y también una vueltecita por la antesala del Madrid austriaco, donde tomé algo con mi hermano Carlos. Por cierto, fue algo ridículo e irremediablemente cachondo encontrarme por casualidad con Roberto e Isaac por la Plaza Mayor. A ver si aquello va a ser también un pueblo.



Mediodía de basket. Mi momento favorito de la excursión sabía que iba a ser la comida que tenía programada con grandes leyendas del periodismo baloncestístico como Quique Peinado (Marca TV), José Luis Mateo (ahora gerente de Alicante), Jorge Sierra y Raúl Barrigón (Hoopshype), Nacho Doria (INEM), César Nanclares (estupenda su nueva revista gratuita MediaCancha) y David Carro, este último agente de los McCoy, Newble, Taggart, Holcomb y Simien.... De todos ellos, es el único que sigue escribiendo en Gigantes, donde los conocí (bueno, a Sierra y a Nanclares no). Disfruté mucho con las bromas, los recuerdos. Gente especial. Se unieron Oriol Humet (director deportivo de Menorca después de haber pasado por otros 500 sitios) y la pareja Piti Hurtado-Juan Pablo Márquez. Me hubiese gustado ser una mosca en la pared de la habitación que ambos compartieron el fin de semana.



La comida en sí fue un poco desastre. Habíamos reservado un cocido en La Daniela, como hace dos años, y resulta que no nos daban mesa hasta las 16.30, tardísimo. Así es que fuimos a otro por allí cerca, llamado Cazorla, en la calle Montesa. La comida en sí no estuvo mal del todo. Lo que se charló fue impagable, e incontable, claro. Los “off the records” hay que respetarlos, comprendedlo.



Tarde de basket. Emocionantísimo Caja Laboral-Bilbao y pasable Barcelona-Joventut. Todo un gustazo verlos con los comentarios “tésnicos” de Juan Pablo, que no se ciñen únicamente a lo táctico, sino a lo que hay detrás. Creo que es muy redundante enrollarme ahora con que la Copa del Rey es la mejor competición del basket europeo y todo lo demás. Está fantásticamente organizada, hay un ambiente estupendo, escenarios como el Palacio de los Deportes la engrandecen, el nivel de juego es superior al de los partidos normales de ACB y Euroliga... No sé, ojalá pudieran dar con la tecla para que ocurriese lo mismo en la liga, aunque es complicado.



Mientras tanto, Alejandro Segalás e Ignacio “Popo” me hacían llegar noticias de lo que sucedía en el Multiusos. El previsible “pim pam púm” ante el Huesca lo acababa ganando el Cáceres, como pasa casi siempre cuando hay un final apretado. Qué oficio tienen estos tipos, ¿verdad? La temporada sigue teniendo buena pinta, y lo diré también aunque se pierdan estos dos partidos fuera de esta semana. El equipo está donde debe estar, como respondí cada vez que me preguntaron en Madrid por la cuestión.



Pude además saludar a viejos amigos como Manolo Flores, feliz también en el Barça de Sandro Rosell en tareas más de representación que deportivas, o David Brabender, en temas de marketing en la empresa de representación Ufirst. La cantidad de rostros conocidos era increíble, incluyendo alguno futbolístico como Aitor Karanka (debe ser toda una experiencia ser segundo de Mourinho, ¿no?). También me quedo con la afición del Caja Laboral. La mejor, sin duda..



Noche de basket. Tras los partidos, un pequeño paseo por los alrededores haciendo tiempo hasta que Pablo Malo de Molina y Dani Barranquero terminaron su trabajo en ACB.com y se vinieron conmigo y con Juan Pablo a un VIPs a cenar. Ya sabéis que no son gran cosa culinariamente, pero se agradece una comida contundente y baratilla cuando llevas toda el día por ahí como un perro. También se charló de basket, aunque con otros matices: Pablo, que es el que maneja la barca de la página, con su historia corporativa, y Dani, poniéndole épica, como siempre, como en lo que escribe con tantísima pasión. Buen chaval, jovencísimo. Se ve que disfruta de cada segundo de la vida. Algunos deberíamos aprender eso.



Total, que nos dieron las 3.30. Y mi tren salía a las 7.40. El sábado trabajé, y no recuerdo haber tenido tanto sueño de forma tan continuada en mi vida, pero ahí estuve. Mereció la pena.

5 comentarios:

lyman dijo...

Aunque no nos das demasiadas pistas, por otro lado lógicamente, de lo que se comentó en esa comida, no nos quitas el "morbo" de saber por dónde fue la comida y lo que allí se "rajó"...veo que os enviaron al tercer turno de La Daniela, cosa que suele ocurrir si te plantas allí sin reserva (y porque no decirlo, también viene bien un poco de "mano")...pero como dices que has ido sabes que la espera y el cocido merecen la pena. Tampoco está mal el Cazorla.

Me ha gustado especialmente la reflexión acerca del indudable atractivo que tiene el formato de la Copa del Rey, que en mi opinión supera el propio modelo de "final a ocho". Quitando que, en deporte, las eliminaciones directas (el vencer o morir tan "duce") son evidentemente muy agradecidas tanto para el espectador aficionado o iniciado, como aquel neutral o de "otro deporte", y tienen un punto de emoción de la que carece una liga regular, es cierto que la Copa en basket ha dado con una "tecla" que no ha alcanzado la ACB. No puede explicarse todo por el formato, y la liga (con los mismos actores y el mismo nivel) no termina de enganchar y, en mi opinión, se convierte en una competición difícil de "seguir".

El jueves se produjo una de esas mezclas inesperadas de gente de distinto "pelaje" que creo que maridó bastante bien. Es lo que tiene el basket. Hablábamos mi hermano y yo de lo curioso del quintento inicial del otro día...y coincidimos que en el análisis del basket cacereño que hicimos hubo una clara "diana" de nuestros dardos...a mi tb se me respeta el "off the record"?

Nunca una copa (y no tomada¡) salió tan cara como en La Posada. Pero es que la juventud, ávida de basket, reclamaba más juego en la cancha...

Un abrazo

Juan dijo...

Me jodió bastante no poder copearme con vos, pero circunstancias mandan...

Confío en que más adelante y de manera sutil deslices alguno de los off the record a los que te refieres.

Grandes detalles el de Basile y Rosell, y muy mal Florentino...

Sin duda es especial el ambiente de la Copa, y sobre todo si -como comentamos en el último post-, acude la afición vitoriana. En la parte que toca al Cáceres, particularmente me apena que la Federación haya dejado en dos los participantes en la " Príncipe "... Creo que la afición cacereña hubiese acudido a una eventual cita y se hubiera hecho notar.

Coincido contigo en que el Cáceres está donde debe. Aranzana fue claro en su objetivo a principio de temporada: mejorar la posición del año pasado y estar entre los 5 primeros. Va por buen camino. Lo de Xacobeo y Murcia se daba por hecho, y en cuanto a Burgos se confirma lo que ya el año pasado dijo Mario Segalás cuando muchos pensaban que no era un duro rival: es el equipo que mejor juega a baloncesto de la categoría. Tremendo Casadevall.

Un abrazo figura. Que viva la Copa.

Daniel dijo...

Qué ilusión ponerme a leer tu blog y al final ver que encima me citas. El placer fue mío, tanto por conocer a Juan Pablo como por estar un ratito contigo, que tenía ganas de verte.

Nos merecemos otra de estas más pausadas, calmadas y menos intempestivas, jaja.

Un abrazo y gracias :)

kmc10m dijo...

Que envidia das Javier, vivir una copa de esa manera: sin el apasionamiento de tener que degañitarte (en tu caso escribir) por tu equipo, vivir los partidos de forma "neutral" y encima compartir mesa y mantel con gente tan importante en el mundo del baloncesto. ¡¡¡Que suerte!!! Lo que dariamos por conocer alguno de esos off de record. jejejeje

Anónimo dijo...

Gracias por acercarse al foro, conde Ortiz... La próxima vez me aseguro y cierro la Daniela tres semanas antes... abrazos. Barri