Hola
Disculpad si no he actualizado en los últimos días, no suelo dejar una semana sin poner algo y esta vez casi que me lo he saltado. Tampoco esta va a ser un "speech" largo, os adelanto que la semana que viene os llegaré con material más fresco. Entre la ristra de excusas (pereza veraniega, falta de inspiración, desesperación por la cercanía de las vacaciones, salidas muy tarde del curro por la Eurocopa) destaca una que voy a comentaros un poquito por encima, para que os sintáis orgullosos.
Resulta que en el tiempo más o menos libre que he tenido en casa me he dedicado a preparar unos reportajes que irán poniendo durante este verano los de ACB.com en la web, no en el blog que allí tengo (que también prometo actualizar el 4 de julio, día D para el momento LEB Oro). En este último año he publicado varios sobre una cosa que sabéis que me encanta: localizar a americanos míticos de la ACB y hacer un repaso de sus carreras y de sus vidas actuales. Así pude contactar con tíos que fueron auténticos ídolos de infancia para mí como Kenny Simpson, Wayne Robinson, George Gervin...
Esta serie de nuevos reportajes que va más o menos sobre lo mismo. Y el motivo de orgullo y satisfacción (que diría el Rey) es que con dos de ellos, Brian Jackson y Andy Toolson, me he encontrado con que una parte de las respectivas conversaciones era la misma. Os aclaro es que, tras retirarse, regresaron a EEUU donde trabajan en diversas historias.
--Oye, ¿y tú desde dónde me llamas? ¿Desde Barcelona?
--De Cáceres, no sé si lo recuerdas.
--Claro, claro, cómo no. ¿Era un equipo que vestía de verde, no? La gente animaba mucho allí, costaba mucho ganar.
Con Toolson estuve recordando la eterna final de Copa, en la que él fue, por supuesto, importante en culminar la remontada que inició Xavi Crespo. "Fue el momento cumbre de mi carrera", me dijo.
El caso es que es fantástico darse una vez más cuenta que formamos parte de la historia del baloncesto español con los números en la mano (el Cáceres debe andar en el puesto 20 de la clasificación ACB de partidos jugados, si alguien encuentra el link actualizado con eso que lo ponga) y también con lo otro, con lo que no se puede medir, con ese sentimiento colectivo de que si se nos conocía era gracias al baloncesto. Que una estrella como Brian Jackson (por cierto, humildísimo, amabilísmo) recuerde el V Centenario más de 15 años después de haber jugado aquí es para pensar: las conclusiones son demasiado obvias.
Espero que os gusten los reportajes cuando salgan, ya irán publicándose, supongo.